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En Japón, los robots Pepper y Whiz se han unido al personal humano para luchar contra el coronavirus que deja centenas de muertos y decenas de miles de contagiados en este país. Están siendo utilizados en algunos hoteles alquilados por el gobierno Metropolitano de Tokio, para atender enfermos con COVID-19 que muestran síntomas leves o asintomáticos y así poder despejar los hospitales saturados del país.
El objetivo principal es apoyar en reducir el trabajo y la presión de las enfermeras y el personal médico, realizando varias funciones como son, desde saludar a los recién llegados en el vestíbulo, diciendo frases como “Por favor, lleve mascarilla en el interior”, con un tono de voz alegre, “Espero que se recupere lo antes posible”, tomarles la temperatura de su cuerpo todos los días alentándolos a descansar, ayudar en tareas de limpieza como entregar medicamentos, sábanas, ropa, recolectar basura y recoger elementos para desinfectar incluyendo las áreas más arriesgadas o de “zona roja” donde el acceso del personal es restringido.
Uno de los primeros hoteles que empezaron a dar este servicio a partir del primero de mayo, fue el hotel Ryogoku con capacidad de alojamiento para unas 300 personas. Dos enfermeras estarán disponibles las veinticuatro horas del día y también un médico estará presente durante el día.
El número de casos de coronavirus en Japón supera los 14.000, con 448 muertes hasta el jueves, según un recuento de Reuters.
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